La Historia de Yogi Bhajan y su Maestro Sant Hazara Singh
Cuando Harbhajan Singh, más tarde conocido como Yogi Bhajan, tenía 14 años, su familia reconoció en él un gran potencial. Para nutrir su crecimiento, lo enviaron a estudiar con Sant Hazara Singh, un devoto Sikh, maestro de yoga y hombre de familia. Era un maestro extraordinariamente estricto, pero era un privilegio ser aceptado como su estudiante.
Sant Hazara Singh ponía continuamente a prueba a sus alumnos para fortalecer su carácter, compromiso y espíritu. Uno de esos episodios quedó inmortalizado en su biografía, recopilada en Messenger of the Guru’s House por Guru Fatha Singh Khalsa.
Naranjas para Santji: Una Lección de Ingenio y Determinación
Una noche, Santji convocó a sus estudiantes y les pidió que robaran naranjas sanguinas de una plantación cercana para repartirlas entre los pobres de la ciudad.
Los estudiantes quedaron impactados y confundidos. Sabían que Santji solía dar órdenes inesperadas, pero nunca habían imaginado que les pediría robar.
“¿Cómo puede pedirnos que seamos ladrones?” se preguntaban.
“No hay forma de robarlas, la granja está fuertemente vigilada con guardias armados”, decían otros.
Pero Harbhajan Singh vio la situación desde otro ángulo:
“En inglés, ‘steal’ también significa ‘salirse con la suya’. Puede tener más de un significado.”
Con esa lógica, diseñaron un ingenioso plan. Vestidos con ropas respetables, llegaron a la granja en camiones y afirmaron que su maestro había arreglado la entrega de las naranjas con el propietario. Los guardias, confundidos, terminaron ayudándolos a recolectar y cargar las naranjas en los vehículos.
A las cuatro de la mañana, la misión estaba cumplida. Habían “robado” las naranjas sin infringir ninguna norma. Sin embargo, Harbhajan sabía que pronto el propietario descubriría la desaparición de su fruta y buscaría respuestas.
Resolviendo la Situación con Sabiduría
Para evitar represalias, Harbhajan acudió a su abuelo, quien rápidamente organizó un encuentro con el propietario de la granja. Durante la reunión, su abuelo presentó la distribución de las naranjas como un acto noble y caritativo. El propietario, en lugar de enojarse, agradeció la oportunidad de ayudar a los pobres y prometió donar sus naranjas cada año.
Este episodio dejó una gran lección en Harbhajan Singh:
A veces, la sabiduría y el ingenio pueden transformar una situación desafiante en una oportunidad para servir a los demás.
Lo que parecía un robo, en realidad, se convirtió en un acto de generosidad y aprendizaje.
El liderazgo no solo requiere obediencia, sino también discernimiento y valentía.
Una Enseñanza para la Vida
Este relato es un reflejo de cómo las pruebas de un maestro pueden forjar un carácter fuerte y resiliente. Yogi Bhajan entendió que la verdadera enseñanza no siempre llega en forma de instrucciones directas, sino en situaciones que nos desafían a pensar, actuar y evolucionar.
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Sat Nam,
Harchand Singh
